Un canapé se canabiliza para redondear su propio mito del eterno retorno.
Con el debido respeto a mí los boquerones me gustan, pero jamás pensé que se comieran unos a otros en un ejercicio levitatorio de homenaje a Escher, no sé, digo yo.Abrazos sabrosos,
no entendi:S
HAHAHAHAHAQUE BUENO
Con el debido respeto a mí los boquerones me gustan, pero jamás pensé que se comieran unos a otros en un ejercicio levitatorio de homenaje a Escher, no sé, digo yo.
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no entendi
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HAHAHAHAHA
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